Barcelona, 14/07/2008: No tengo como costumbre salir los lunes. Pero en esta ocasión, Tom Watis (si, el mismo, Tom Waits) tocaba su primera noche en Barcelona y, claro está, hice una excepción.
La compra de entradas fue difícil, el sistema de reserva exclusivamente telefónica, no lo puso facil, la recogida, una hora antes del concierto estuvo muy bien organizada. Todo vale para ver a alguien que lleva más de 4 décadas tocando y jamás había pisado España.
El Auditórium del Forum estaba a rebosar, largas colas para recoger las entradas, y nervios ante la cita. Los González llegamos con tiempo, así pudimos disfrutar de los preliminares, cervecita, chips,.. ver lo malo que era el merchandising (imposible comprarme una camiseta, las que vendían consistían en “manchas de aceite pintadas por Tom”, y uno es un fan, pero tampoco para dar 20 Euros por manchas de aceite.
A las 22:10, 40 minutos tarde, empezó el concierto. Tom en el centro del escenario minimalista, vestido de oscuro, botas y con uno de sus típico sombrero de bombin, moviendo sus manos cuan espantapájaros zarandeado por el viento eran suficientes para los incondicionales fans que allí estábamos reunidos (excepto Mónica, que venía de acompañante de piedra, con menos expectativas de que le guste de las que tiene un toro de salir a hombros en la plaza), y claro que alguien con voz de lija y dando patadas al suelo levante 3.200 personas no lo acaba de entender.
La compra de entradas fue difícil, el sistema de reserva exclusivamente telefónica, no lo puso facil, la recogida, una hora antes del concierto estuvo muy bien organizada. Todo vale para ver a alguien que lleva más de 4 décadas tocando y jamás había pisado España.
El Auditórium del Forum estaba a rebosar, largas colas para recoger las entradas, y nervios ante la cita. Los González llegamos con tiempo, así pudimos disfrutar de los preliminares, cervecita, chips,.. ver lo malo que era el merchandising (imposible comprarme una camiseta, las que vendían consistían en “manchas de aceite pintadas por Tom”, y uno es un fan, pero tampoco para dar 20 Euros por manchas de aceite.
A las 22:10, 40 minutos tarde, empezó el concierto. Tom en el centro del escenario minimalista, vestido de oscuro, botas y con uno de sus típico sombrero de bombin, moviendo sus manos cuan espantapájaros zarandeado por el viento eran suficientes para los incondicionales fans que allí estábamos reunidos (excepto Mónica, que venía de acompañante de piedra, con menos expectativas de que le guste de las que tiene un toro de salir a hombros en la plaza), y claro que alguien con voz de lija y dando patadas al suelo levante 3.200 personas no lo acaba de entender.
Más de dos horas de show que no olvidaremos en las que Tom repasó sus últimas cuatro décadas de discos, pasando de sus poemas hablados al gospel, baladas jazzy, blues primitivo, cabaret,... canciones como “Lucinda”, “Invitation to the Blues”, “Rain dogs”… Genial. Vaya noche. Cuando alguien es un mito es porque es capaz de demostrarlo, y ahí estuvo Tom, a la altura, poniendo el listón alto. Y los González allí. Algún día podré decir a mis nietos: “Yo, lo vi”, igual que a los Ramones, U2, Black Crows, …Por supuesto, yo caí rendido a los pies de una actuación tan correcta, profesional y genial a la vez. Y qué pasó con Mónica, pues que…no cantó “Hold On” y llegó a casa con dolor de cabeza.
Genial, genial,.... y aunque no la tocara Moni: Hold On
They hung a sign up in out town
"if you live it up, you won't
live it down"
So, she left Monte Rio, son
Just like a bullet leaves a gun
With charcoal eyes and Monroe hips
She went and took that California trip
Well, the moon was gold, herHair like wind
She said don't look back just
Come on Jim
Oh you got to
Hold on, Hold on
You got to hold on
Take my hand, I'm standing right here
You gotta hold on
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